Una investigación de la Universidad de California y la Academia de Ciencias de California (EE UU) corona a la araña voladora, que pertenece a la familia de las arañas selenopidae, como el animal cazador más rápido del mundo porque son capaces de sentir a las presas que se acercan desde cualquier dirección y girar en un octavo de segundo para atarcarlos, según explican en su página web.

El secreto de su rapidez reside en la rápida flexión de sus patas. "Alrededor de la mitad de las especies de arañas no usan telarañas para atrapar a sus presas", explica la doctora Sarah Crews, investigadora de la Academia de Ciencias de California. "Algunas acechan y se abalanzan, mientras que otras hacen emboscadas a base de sentarse y esperar, como las voladoras".

Tanto ella como el autor del estudio, que se publica el lunes en Journal of Experimental Biology, examinaron, gracias a unas cámaras de vídeo sincronizadas de alta velocidad, el comportamiento de estos arácnidos para "documentar y modelar sus giros rápidos" y así poder "trazar un curso para hacer que los robots y otras máquinas sean más maniobrables".

Su maniobra de giro es la más rápida del mundo porque son capaces de hacer tres rotaciones completas en lo que una persona pestañea.