Según ha informado la Gerencia Territorial del ICS en el Camp de Tarragona, el consejo acordó sacar a concurso la provisión de la segunda sala, que se ubicará en paralelo a la actual para optimizar espacios comunes como la secretaría, los despachos médicos, los vestidores y zona de descanso.

La sala actual de hemodinámica, que durante los recortes causó polémica por prestar servicio 12 horas al día y provocar el traslado de un paciente a Barcelona que finalmente murió, tiene un uso intensivo de 24 horas al día los siete días de la semana para la activación del Codi Infart.

El año pasado realizó 1.000 angioplastias y registró 520 activaciones de código infarto, lo que representa medio centenar más que durante 2016.

El jefe de Cardiología del Hospital Joan XXIII, Alfredo Bardají, ha explicado que "pese al gran volumen de actividad de esta sala, todavía queda una parte de la población, concretamente la de El Vendrell, que se atiende en Barcelona.

Ha puntualizado que esta población supone unos 400 cateterismos diagnósticos y terapéuticos al año que se harán en esta segunda sala, que contará con tencología puntera con integración de técnicas de imagen cardíaca y servirá para hacer 150 procedimientos de electrofisiología.