El metro de Barcelona no compraba convoyes nuevos desde el año 2005, excepto los de la línea 9. El consejo de administración de Transports Metropolitans (TMB) ha acordado ahora adquirir una docena de nuevos trenes que se incorporarán a las líneas 1, 3, 4 y 5 el próximo año 2019 para incrementar hasta en un 20% la capacidad del servicio en las horas punta en los días laborables: de 7 a 9 horas de la mañana y de las 17 a las 20 horas por la tarde.

Los estudios con los que cuenta TMB indican que la previsión de crecimiento de viajeros de cara a 2025 es del 25%, por lo que el operador quiere avanzarse a esta posibilidad.

La operación de adquisición la aprobó el pasado viernes 9 de marzo la comisión de contratación de TMB, ha avanzado este lunes la concejal de Movilidad del Ajuntament de Barcelona, Mercedes Vidal. Esta está incluida en el plan de aumento de infraestructuras aprobado en 2017 por la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) para mejorar el servicio hasta el 2021.

La compra está valorada en unos 92 millones de euros y los trenes comenzarán a implantarse a partir del segundo semestre del año que viene. 4 se destinarán a la línea 1, otros cuatro a la línea 5, dos a la línea 4 y otros dos a la línea 3. TMB, con este refuerzo, busca que circulen el máximo de trenes posibles de la flota en las horas con más demanda de viajeros y que el tiempo de espera sea inferior a los dos minutos y medio "pasando de los 120 trenes actuales en hora punta a los 144 en 2020", 17 más, como ha detallado este lunes el director de operaciones de TMB, Jordi Mitjà.

La ocupación de los trenes del suburbano en hora punta alcanza del 110% al 130% en algunas líneas. Si la media es de 4 pasajeros por metro cuadrado, en hora punta se llega a los 6 viajeros por metro cuadrado. La cifra de usuarios bajó durante la crisis y el año pasado no batió récords debido a los acontecimientos políticos y a los atentados del 17-A. Pero si las previsiones no fallan, este 2018 cerrará con mil millones de viajes, avanzándose dos años a la cifra esperada para 2020.

La idea de TMB es ir ampliando la plantilla hasta 2021, ha afirmado la directora de personal, Mireia Clua, a medida que la empresa CAF les vaya sirviendo los nuevos trenes, cuatro de la serie 6000 para la línea 1, dos de la serie 5000 para la linea 3 y cuatro del mismo modelo para la línea 5. Alstom, por su parte, proporcionará dos trenes de la serie 9000 para la línea 4.

El director del área técnica de TMB, Jordi Micàs, ha explicado a su vez que las líneas L1 y L5 son las más saturadas, por lo que la reducción de las frecuencias de paso sobre todo en los tramos centrales de estas dos líneas podría incorporar más adelante salto de estaciones. Es decir, que en paradas donde exista una menor demanda pare un tren sí y otro no. Esta situación, que sería inédita en el metro de Barcelona, podría darse en un futuro cercano entre las estaciones de Plaça de Sants y Sagrera en la línea 5, por ejemplo. 

El secretario de infraestructuras de la Generalitat, Ricard Font, ha recordado que "urge finalizar la L9 del metro porque servirá para desatascar y descongestionar el centro de la ciudad". El próximo verano se inaugurarán dos estaciones, otras dos a principios del año que viene y la última será la del Camp Nou. Font también ha hablado del posible crédito de 750 mill0nes de euros que podría conceder el Banco Europeo de Inversiones (BEI) que permitiría retomar en 4 o 5 años el tramo central de la L9.

Según Font, muchos de los viajeros que actualmente utilizan las líneas 1 y 5, muy saturadas, pasarán a usar la L9, que será una línea "de cierre transversal" una vez se desencalle la financiación.

En 2017 se pusieron en circulación siete trenes más en hora punta en las líneas 1,2 y 5 y este año se pondrán en servicio en hora punta casi la totalidad de trenes disponibles en cada línea, incluidos los reservados para el mantenimiento programado. De este modo prestarán servicio 132 trenes en las cinco líneas, cinco más que  los actuales.