Con miel, con almíbar caramelizado, de chocolate... Hay tantos tipos como personas las cocinan, en casa o en las confiterías de toda la ciudad. Un bocado perfecto para reponer fuerzas estos día.
Nada mejor que una buena torrija para endulzar las largas jornadas de Semana Santa y tener la excusa perfecta para hacer un alto en el camino, descansar un poco y repasar los itinerarios.
No es el único, pero sí uno de los dulces más típicos de estas fechas, un pecado que hace días adorna los escaparates de las confiterías y, a buen seguro, las cocinas de muchas casas de la ciudad. Pero, ¿cómo se hacen las torrijas?
Tipos de recetas de torrijas
Mercedes utiliza en su casa el pan de molde específico que ya se vende en casi todas las panaderías. En su caso, riega las torrijas con almíbar caramelizado, porque "ni a mi marido ni a mi hija les gusta la miel", nos cuenta. Eso sí, "ahora pongo un límite, porque antes duraban un suspiro y me pasaba toda la semana haciendo torrijas", añade entre risas.
Isabel mantiene la receta que aprendió de su madre y utiliza pan duro y miel. En su caso, también las cocina no solo para ella, sino "para casi toda la familia", lo que incluye "a mis dos hijos, a mi hermana y a mi madre, que ya es mayor y dice que no está para esos trotes, aunque comerlas sí que las sigue comiendo".
Tanto con miel como con azúcar, con canela o incluso con chocolate, grandes opequeñas, se pueden encontrar en una de las pastelerías con más solera de la ciudad, Los Ángeles, en pie desde 1932 (en las céntricas calles Adriano y San Pablo y en el barrio de Los Bermejales). Advertencia: su escaparate estos días es toda una tentación.
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