El Ayuntamiento de Barcelona opta por reurbanizar la zona de la Rambla del Raval junto con las Plazas de Vázquez Montalbán y Salvador Seguí con un triple objetivo: definir la Rambla del Raval como un espacio central que pueda ejercer de plaza pública, mejorar la transversalidad entre estos tres espacios para que haya una mejor conexión y hacer de Plaza Vázquez Montalban un espacio habitable y destinado al juego.

Con esta reforma, se pretende favorecer los usos de los vecinos  y de vida cotidiana en este ámbito, con zonas de estada, actividades o juego para así poder fomentar un uso intergeneracional de los espacios y evitar los usos excluyentes.

El proyecto de remodelación empezará en otoño de este año y se prevé que finalice en la primavera del año 2019. Las modificaciones suponen una inversión de 1 millón de euros.

La idea, que se enmarca dentro del plan de barrios del Raval Sud  y del Gótic Sud, es fruto de un proceso participativo que se ha trabajado tanto con los vecinos del entorno, como con los jóvenes y las diferentes comunidades.

"La reforma contempla sacar gran parte de los parterres de las palmeras medianas que hay ahora, hacer dos parterres de verde, ubicar en la Rambla un espacio de juegos para niños, trasladar el Gato de Botero y hacer una plataforma única en el espacio central para mejorar la conectividad. En la plaza Vázquez Montalban se pondrá verde, se dibujan juegos en el suelo, se colocará una pista de bádminton y una de ping-pong y se pondrá un espacio de juegos en la plaza Salvador Seguí" ha explicado la Regidora del distrito de Ciutat Vella, Gala Pin, en rueda de prensa este viernes. Pin, defiende que ante el poco espacio público con el que cuenta el distrito de Ciutat Vella, "hay que sacar-le el máximo rendimiento".

El Ayuntamiento apuesta por dar una nueva centralidad a la Rambla del Raval para así potenciar el espacio. Las actualizaciones supondrán el ensanchamiento de la parte central por ambos lados, se construirán cuatro parterres y los que hay actualmente pasaran a ser espacios de uso pavimentado, se reordenaran las terrazas, se instalará un lavabo público autorrentable y una fuente. Además, la rotonda norte (parte montaña) se anulará para pasar a formar parte del eje central de la Rambla. En el caso de la rotonda sur, se mantendrá su funcionamiento.

El Gato de Botero se desplazará hacia el centro de la Rambla con el objetivo que gane protagonismo. Aún así, se mantendrá en un lateral para así no impedir el paso.