Los agentes iniciaron las investigaciones después de que, en agosto de 2016, se sustrajesen 594 piezas de jamones por un importe total 23.000 euros en un secadero ubicado en el polígono industrial de la Venta del Aire de la localidad turolense de Albentosa.

Después, fueron cometidos otros dos robos más; en el polígono industrial El Santo en Bronchales, donde sustrajeron 554 jamones secos, y en el polígono industrial Los Cerezos de Mora, donde se hicieron con 350 piezas de jamón y 350 de paleta.

El análisis pormenorizado de toda la información recabada sobre vías de comunicación y vehículos sustraídos llevó a los agentes del Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Teruel a constatar que los autores del robo estaban especializado en la comisión de este tipo de delitos.

Actuaban en establecimientos dedicados al almacenamiento, tratamiento y venta de jamones de denominación de origen de Teruel. Para acceder a ellos, cortaban la valla metálica que rodeaba el perímetro del secadero, una vez dentro realizaban un butrón en la pared y, en escasos minutos, sustraían de las jaulas todos los jamones que podían, emprendiendo rápidamente su huída hacia la provincia de Valencia, utilizando siempre vías de comunicación distintas.

Gracias a los datos recabados en el transcurso de la investigación, entre los días 2 y 3 de mayo de 2018 agentes pertenecientes al Grupo de Patrimonio de la UOPJ de la Guardia Civil de Teruel se desplazaron a la localidad valenciana de Tavernes Blanques, donde procedieron a la detención de las cuatro personas, de nacionalidad española con edades comprendidas entre los 45 y 27 años, como presuntas autoras de los robos.

La operación ha sido desarrollada por la Comandancia de la Guardia Civil de Teruel, contando con la colaboración de la Benemérita de Valencia y dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Teruel.