Pilar López, presidenta ejecutiva de Microsoft Ibérica, ha recibido en los Premios 20blogs el galardón a Personalidad Online del año. En entrevista, López habla del liderazgo y la defensa de los valores, entre otros temas: "Creo que el liderazgo no es cuestión de género; lo realmente importante para las empresas debe ser contar con el mejor talento", señala.

Muchos destacan su sencillez y naturalidad... ¿se puede presidir una multinacional sin perder esos valores?

El diálogo, el respeto, la libertad responsable, la profesionalidad, el sentido crítico, la disponibilidad, la actitud de aprendizaje permanente, el servicio a los demás y la solidaridad forman parte de mis valores personales y, también, como no puede ser de otra forma, de mi manera de actuar como directivo. Creo que el liderazgo no está reñido con la defensa de unos valores como los que he mencionado ni, por supuesto, con la sencillez y la naturalidad.

Intento hacer mi trabajo con mucha ilusión, con energía. Intento movilizar a mi equipo en una misma dirección, tratando de que los profesionales de Microsoft estén inspirados y motivados para lograr un impacto duradero, tanto en nuestros clientes como en la sociedad en general. Todo ello, con una cultura de innovación basada en el aprendizaje continuo, en el convencimiento de que todas las personas pueden crecer, desarrollarse y cambiar su forma de pensar. Creo que para ser un buen líder hay tres cosas a tener en cuenta: hay que crear claridad y reducir la complejidad; generar entusiasmo y energía en el equipo; y diseñar el camino hacia el éxito conjunto, trabajar asumiendo riesgos y aprendiendo de los errores para capacitar al equipo para lograr el éxito.

Ya ha recibido varios premios, ¿qué significa este para usted? ¿A quién se lo dedicaría?

Para mí es un auténtico honor recibir este premio que reconoce dos aspectos. En primer lugar, el extraordinario momento que vive Microsoft y la industria de tecnologías de la información en España. Este último año hemos registrado crecimientos muy importantes en nuestro mercado, y, junto a nuestros más de 6.000 partners en España, estamos liderando procesos de transformación digital en todos los segmentos y sectores; desde las grandes compañías globales a las pymes, pasando por organizaciones públicas de todos los tamaños.

En segundo lugar, me gusta y quiero agradecer especialmente, que 20minutos y Henneo quieran destacar el papel de la mujer en la industria de la tecnología. Dar visibilidad a mujeres de éxito que puedan convertirse en referentes para las niñas interesadas en la ciencia y la tecnología es un paso más en el objetivo de impulsar vocaciones tecnológicas y desterrar los estereotipos de género en este sector.

Y si tengo que dedicárselo a alguien, lo haría a todo el equipo de Microsoft, pues no se trata de un éxito individual, sino de un reconocimiento a un trabajo de todos los que componemos Microsoft en España.

Ha ido ascendiendo poco a poco, ¿cómo definiría el camino a la presidencia?

El balance es muy positivo. Microsoft es un lugar para la exploración, la creatividad, la innovación y el crecimiento profesional. Una de las cosas que más me motivó a la hora de asumir la presidencia de Microsoft fue que la compañía se encontraba en un momento muy interesante de crecimiento y transformación. Estamos pasando de ser una compañía que creía que lo sabía todo a ser una organización absolutamente comprometida con el objetivo de aprenderlo todo. Hemos puesto en marcha un proyecto de transformación cultural, liderazgo digital y gestión de talento, que forma parte de un proceso de transformación que habilita y posibilita el cambio global, que requiere nuevos perfiles profesionales y exige una nueva cultura de organización y de innovación basada en el aprendizaje. Esta es la única manera de avanzar y lograr nuestra misión de capacitar a cada persona y cada organización en el planeta para lograr más.

¿Ha tenido más piedras en el camino por ser mujer?

Creo que el liderazgo no es cuestión de género; lo realmente importante para las empresas debe ser contar con el mejor talento. Y este tiene que ser diverso, con el fin de entender y representar la diversidad de la sociedad y aportar puntos de vista diferentes.

La mujer ha ido adquiriendo protagonismo en todos los aspectos de la sociedad, desde la política hasta el ámbito empresarial. Aun así, es un terreno en el que queda mucho camino por recorrer. Alcanzar la igualdad de género y la diversidad en el seno de las organizaciones debe ser una responsabilidad social y empresarial.

En nuestro caso, entendemos que el mundo, nuestros clientes son diversos. Por ello, consideramos imprescindible que la organización sea un reflejo de los clientes a los que servimos y sea lo más diversa posible. En lo que se refiere a diversidad de género, en Microsoft nos encontramos por encima de la media, con un 37% de mujeres en la compañía. En el comité de dirección, este porcentaje se eleva a un 42%. Estoy orgullosa de contar con un equipo diverso, en el que mujeres y hombres pueden desarrollar todo su potencial.

Percibe usted esa brecha de género laboral? ¿Cree que se está acortando, es demasiado ancha aún?

En la llamada cuarta revolución industrial, en plena era digital, seguimos viendo cómo los estereotipos de género siguen aún muy arraigados en nuestra sociedad. Hay un alto porcentaje de niñas que no está accediendo a todas las oportunidades profesionales relacionadas con materias como Ciencia, Tecnología, Ingeniería o Matemáticas. Según datos de la Comisión Europea, la paridad de hombres y mujeres en la industria digital permitiría elevar el PIB de la Unión Europea en unos 9.000 millones de euros anuales. Pero esta paridad resulta una quimera si no comenzamos desde la base, fomentando desde edades tempranas el interés de las niñas por los estudios STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), que proporcionan las habilidades necesarias para competir en la era digital.

Es un hecho que el mercado laboral necesita de profesionales formados en tecnología. En la actualidad, las mujeres representan más de la mitad de las estudiantes universitarias, pero son solo el 25% de los estudiantes que cursan carreras técnicas. De hecho, menos del 30% de los profesionales que trabajan en la industria de tecnología en España son mujeres. Para una empresa como Microsoft, que busca la diversidad a la hora de incorporar el mejor talento, se trata de un importante problema que nos corresponde a todos solucionar. Es el momento de reflexionar e intentar atajar esta desigualdad, fomentando las vocaciones tecnológicas y científicas desde la niñez. Si no impulsamos el interés de las mujeres por este tipo de estudios, será difícil reducir la brecha de género en este sector. No podemos renunciar al 50% del talento, a la hora de incorporar a los y las mejores profesionales a nuestras organizaciones.

¿Cómo consigue compatibilizar su vida personal y profesional?

Se trata de buscar un equilibrio. Si en algún contexto resulta evidente el concepto de transformación digital, es en cómo está cambiando la forma en que trabajamos. La conciliación es algo que parece ir ligado a las mujeres, pero en Microsoft no lo entendemos así; entendemos que es una prioridad para todos nuestros empleados, mujeres y, por supuesto, hombres. El trabajo de nuestros empleados, hombres y mujeres, no se mide por el número de horas que permanecen en la oficina, sino por sus resultados en función de objetivos establecidos anualmente. Entendemos que el trabajo debe ser una actividad, no un lugar al que desplazarse. Pero ello no es posible sin herramientas tecnológicas que hagan realidad este modelo de trabajo flexible y permita trabajar desde cualquier lugar, en cualquier momento. En Microsoft no hablamos de conciliación, hablamos de flexibilidad, de cómo favorecemos que nuestros empleados puedan organizar su agenda en función de sus prioridades.

Las tecnologías tienen gran influencia en el día a día de las personas, pero... ¿hacia dónde cree que nos dirigimos?

Cada empresa, cada proceso, cada producto y la forma de trabajar de cada empleado serán redefinidos en los próximos años mediante el uso de la inteligencia artificial. Una inteligencia artificial que no viene a sustituir a la humana, sino a potenciarla. Lo cierto es que este tipo de tecnologías ya está presente en muchas de las aplicaciones, herramientas y dispositivos que utilizamos cada día en el ámbito personal y profesional.

Hoy, gracias a tecnologías de inteligencia artificial, los ordenadores pueden entender una conversación hablada, incluso mejor de lo que lo haría una persona, ofreciendo traducción a múltiples idiomas en tiempo real.

También la inteligencia artificial permite a las personas ciegas obtener una audiodescripción de lo que ocurre en su entorno, convertir a voz los textos escritos e interpretar el estado de ánimo de las personas que participan en una conversación en función de su expresión facial. Agentes virtuales y chatbots se han convertido en interlocutores de los clientes que llaman a los centros de atención telefónica, y son capaces de ofrecer de manera predictiva información precisa en cada situación. Y, por supuesto, la inteligencia artificial está detrás de las recomendaciones de compra que recibimos cada vez que realizamos una búsqueda en internet. Son solo algunos ejemplos de uso de la inteligencia artificial en nuestro día a día.

En Microsoft llevamos más de 25 años trabajando en el terreno de la inteligencia artificial y las tecnologías cognitivas, con un equipo formado por más de 5.000 científicos e ingenieros. Creemos firmemente que personas y máquinas trabajarán juntos para encontrar soluciones a los principales desafíos a los que se enfrenta la humanidad. Esto ocurrirá en todos los sectores de actividad y en un plazo mucho menor del que ahora podamos imaginar, y sus beneficios serán enormes. Y también pensamos que es fundamental establecer un diseño ético de la inteligencia artificial, de forma que se protejan los derechos de los usuarios de la tecnología y se garantice la privacidad y seguridad de sus datos.